Un
Espantoso Incendio Ocurrido El 29 De Diciembre De 2002, En La Ciudad De Lima,
Perú, Dejó Un Saldo De 291 Muertos Y Centenares De Heridos. La Mayoría De Las
Víctimas Pertenecían A Los Millones De Pobres Marginados Que Diariamente Salen
A Las Calles De Las Ciudades Peruanas A Ganarse Unos Cuantos Centavos O A
Comprar Productos Clandestinos Baratos.
El
siniestro se inició aproximadamente a las siete de la tarde cuando una persona
encendió un fuego artificial en las galerías de Mesa Redonda, ubicadas en el centro
histórico de la ciudad. Mesa Redonda es un mercado informal donde miles de
comerciantes venden sus productos en las condiciones más precarias e inseguras
imaginables.
Durante el
mes de diciembre, como es la tradición, los comerciantes de Mesa Redonda venden
cientos de toneladas de fuegos artificiales, los cuales miles de personas de
escasos recursos compran para celebrar las navidades y el año nuevo.
El fuego
se expandió rápidamente, consumiendo cinco manzanas en escasos minutos porque
el piso estaba cubierto de pólvora que se habia salido de las cajas en el
momento de descargarlas para su venta.
Cuarenta
carros bomba y 440 bomberos combatieron el fuego por tres horas. Éstos lograron
rescatar treinta personas atrapadas en un altillo.
Las
escenas eran dantescas. Restos de madera, papel y plástico lanzaban fétidos
olores. Vehículos con chofer y pasajeros carbonizados en medio de la pista. En
una esquina, más de una docena de cuerpos totalmente calcinados se aferraban a
sus carretillas de carga o paquetes.
En otro
lugar se descubrieron 30 cadáveres apiñados en un espacio de dos metros
cuadrados. Muchos comerciantes murieron asfixiados mientras buscaban refugio
dentro de sus tiendas y cerraron las puertas para protegerse del vandalismo.
Decenas
más murieron electrocutados, posiblemente debido a una sobrecarga de la
estación eléctrica que se encontraba en el lugar del incendio.
En los
días siguientes, cientos de familiares acudieron a los hospitales del centro de
Lima y la morgue mostrando fotografías de sus seres queridos desaparecidos. En
vano se aferraban a la ilusión que alguien les pudiera dar la buena noticia que
sus familiares estaban con vida. Dentro de la confusión el número de
desaparecidos llegó a más de 800.
Cerca de
4,500 comerciantes de Mesa Redonda perdieron sus empleos y escasos ahorros. El
30 por ciento de las víctimas eran jóvenes y en su mayoría mujeres.
UN gran
número de los muertos eran de origen campesino provenientes de la sierra. Estos
pertenecían a los cientos de miles que durante los últimos 20 años emigraron a
la ciudad huyendo de la pobreza, de los narcotraficantes y de la guerra sucia
entre el ejército y las guerrillas de Sendero Luminoso.
El
gobierno peruano tuvo gran parte de la responsabilidad. El Ministerio del
Interior autorizó la importación de 1,100 toneladas de material pirotécnico, la
mayoría del cual fue destinado a Mesa Redonda. Durante el mes de diciembre la
Municipalidad de Lima repetidas veces trató de controlar la venta de fuegos
artificiales.
En un
momento había más de 1,100 policías destinados a impedir la venta en esa
localidad. Pero días antes del incendio el 80 por ciento de los policías fueron
retirados por orden del general de policía responsable, Luis Sanchez Arias.
Después
del siniestro, el general Luis Sanchez Arias fue retirado del servicio.
Muchas de
las viviendas destruidas fueron construidas de quincha-una mezcla de paja y
barro en uso desde la época colonial. Cortos circuitos, como el que le costara
la vida a docenas de personas en Mesa Redonda, han sido el principal motivo de
incendios anteriores en otros mercados informales.
Ha habido
una comisión investigadora en el Parlamento Peruano y algunas investigaciones y
luego, poco más.
Fuente:
(Artículo sacado de la página http://www.quenoserepita.com.ar/otroscromagnones_mesaredonda2)
No hay comentarios:
Publicar un comentario